De los recuerdos divertidos, y de como las cosas se rompen.

Esta historia comienza mas o menos como en mil novecientos noventa y algo, jo..., me hago vieja -prosigamos-.


Recuerdo, y con bastante claridad, cuando estudiaba yo cuarto grado de primaria, si, con mi uniforme de camisita blanca planchadita por la mañana, arrugada y sucia por la tarde, flada de un plizzzzz, y medias hasta las rodillas; tuvimos examen de "biología", eran tan solo cinco preguntas y la cuarta rezaba: "Nombre los tipos de vasos".


A mi lado se sentaba "Jenny la gordita de pelo rizado".  Jenny nunca estudiaba, y por eso sacaba ceros, Gaby por su lado siempre sacaba 20 jajaja... ehm... Bueno, resulta que la inocente Jenny le pregunta a Gaby: "-psss psss ¿cuales son los tipos de vasos?, ¿son de cartón, de plástico y de vidrio no?", a lo que Maria Juaquina (así me llamaban en la primaria, ni idea de por que xD), le sonríe con la malicia de un adulto de 42 y no le responde, tan solo piensa "pero esta si es loooca, osea, -risa interna, risa interna-". Por supuesto, Jenny desesperada por escribir algo en su hoja de examen insiste, hasta que obtiene la siguiente respuesta: "ehm, si".


Por supuesto Jenny saco cero, y la Maestra Iris consternada por la respuesta tan "loca" leyó su examen a todos los niños del salón usándolo como ejemplo de lo que no se debe hacer. Aunque ahora que lo pienso Jenny era bastante creativa, si hubiese sido clase de manualidades, o artes plásticas, o educación para el trabajo, que se yo, eso de los tipos de vasos hubiera estado bastante bien xD pero yo creo que la niña estaba un poco confundida.


Me pregunto si usted si sabe cuales eran esos tipos de vasos, jaja, he aprendido a no sobrestimar a nadie. Mis disculpas, aun tengo 42 años.


En fin, esta historia no venia al caso pero la recordé pensando en "vasos de vidrio", y la escribí, así tal vez no la olvide cuando tenga 76 años y las locuras sean tantas que ya no me alcance la cabeza para recordar.


Como me gustan las metáforas, las analogías y los eufemismos, el que haya leído dos o tres cosas aquí lo sabe, mi cabeza armo esta, tal vez un poco ridícula idea.


Hoy mientras viajaba de regreso a casa, un poco nostálgica, triste o melancólica, ni idea, es casi lo mismo; pensé, las relaciones que tenemos son como vasos de vidrio. Algunas mas frágiles que otras, y en un instante de tiempo se pueden romper. A veces las acciones, o las simples palabras son capaces de destrozar cristales, y pues ya no hay vuelta atrás. En otras ocasiones solo las resientes y debes tener mas cuidado, porque en cualquier momento se desmorona el vaso frente a tus ojos al mas leve toque. Las amistades se rompen, y te toca beber el agua con las manos.


Cuando se rompe una relación, algo se rompe también dentro de ti. Puede que sane, pero deja su marca.


Y si me dicen que ningún vaso dura para siempre, les diré que hay botellas de vino mas viejas que mi abuela, pero son extremadamente raras y costosas.

Foto: Furumaru